Nuestro ciclo anual de conferencias en el Museo de Historia del Arte (Ejido 1326) comienza a fines de marzo con las siguientes presentaciones.
22 de marzo 19.30 hs.
"CULTURA CICLÁDICA"
Por Ruben Dominguez
26 de abril 19.30 hs.
"ARTE RUPESTRE ESPAÑOL"
Por Antonio Muniz
24 de mayo 19.30 hs.
"LAS OLIMPIADAS"
Por Ruben Dominguez y Antonio Muniz
21 de junio 19.30 hs.
"REDESCUBRIENDO EL ANTIGUO EGIPTO"
Por Alberto Galasso
Este ciclo culminará con dos conferencias más en julio y agosto con la presentación de piezas egipcias del acervo del MuHAr a cargo de Víctor Capuchio.
sábado, 25 de febrero de 2012
La Avenida de las Esfinges recupera su esplendor
Más de cinco años de arduas labores de restauración finalizarán el próximo mes de marzo en Egipto con la inauguración oficial de la Avenida de las Esfinges, uno de los enclaves turísticos más atractivos y famosos de Luxor.
La avenida, de 2.700 metros de largo y 76 de ancho, conecta los templos de Luxor y Karnak y está flanqueada por un gran número de esfinges. Las figuras poseen cuerpo de león, siendo su cabeza la representaicón del faraón Nectanebo I, quien ordenó construir la avenida durante su reinado en el 380-362 A.C.
Si bien es cierto que una gran zona del paseo ha permanecido siempre abierta para los visitantes de Luxor, hasta este momento la mayor parte se encontraba bajo tierra. Los excavadores han desenterrado más de 650 esfinges de las 1.350 existentes. En las tareas de excavación y restauración han colaborado el Consejo Supremo de Antigüedades y el Gobierno de Luxor.
La apertura de esta ruta invitará a los visitantes a caminar entre ambos templos tal y como hacían los antiguos faraones de la época. Se cuenta que fue la propia reina Cleopatra quien ordenó las tareas de restauración de la avenida cuando estaba de paso durante su crucero por el Nilo junto a Marco Antonio.
Este soberbio bulevar es también célebre por acoger desde tiempos remotos el Festival de Opet, que conmemora el viaje anual en barca sagrada del dios Ra desde el templo de Karnak hasta Luxor, donde iba a visitar a su esposa, la diosa Mut.
Fuente: El Economista
La avenida, de 2.700 metros de largo y 76 de ancho, conecta los templos de Luxor y Karnak y está flanqueada por un gran número de esfinges. Las figuras poseen cuerpo de león, siendo su cabeza la representaicón del faraón Nectanebo I, quien ordenó construir la avenida durante su reinado en el 380-362 A.C.
Si bien es cierto que una gran zona del paseo ha permanecido siempre abierta para los visitantes de Luxor, hasta este momento la mayor parte se encontraba bajo tierra. Los excavadores han desenterrado más de 650 esfinges de las 1.350 existentes. En las tareas de excavación y restauración han colaborado el Consejo Supremo de Antigüedades y el Gobierno de Luxor.
La apertura de esta ruta invitará a los visitantes a caminar entre ambos templos tal y como hacían los antiguos faraones de la época. Se cuenta que fue la propia reina Cleopatra quien ordenó las tareas de restauración de la avenida cuando estaba de paso durante su crucero por el Nilo junto a Marco Antonio.
Este soberbio bulevar es también célebre por acoger desde tiempos remotos el Festival de Opet, que conmemora el viaje anual en barca sagrada del dios Ra desde el templo de Karnak hasta Luxor, donde iba a visitar a su esposa, la diosa Mut.
Fuente: El Economista
martes, 21 de febrero de 2012
Reconstrucción de la 2º barca solar del faraón Keops
Tras pasar 4.550 años bajo la arena, la segunda barca solar del más poderoso de los faraones egipcios, Keops, comenzó este lunes a ver la luz en la meseta de Guiza de El Cairo, en un periplo que le está llevando del "más allá" a la superficie, de la mano de arqueólogos egipcios y japoneses.
Este lunes, arqueólogos egipcios y japoneses han comenzado las tareas de restauración de la segunda barca solar del faraón Keops. Los expertos, pertrechados con monos blancos y capucha, iniciaron este lunes el proceso para sacar las 600 piezas de madera en las que fue desmontada en su día la embarcación, enterrada junto a la Gran Pirámide de Keops.
Por razones de conservación, la barca no podrá ver la luz del sol, aunque le dieron la bienvenida en la superficie los focos de las cámaras de televisión en el interior de la carpa, que protege las excavaciones.
Keops (2609-2584 a.C), el segundo faraón de la IV dinastía, hizo justicia a su grandeza y su barca solar consiguió congregar a un gran número de periodistas locales e internacionales que fueron testigos de la extracción de un primer trozo de madera de la fosa, donde ha permanecido sepultada durante milenios.
Junto a la carpa, preparada para mantener las condiciones ambientales óptimas, varios bloques de piedra se alineaban tras haber sido retirados en los últimos meses de la excavación.
Esta barca es una de las cinco que fueron enterradas junto a la famosa tumba de Keops, de las que una ha sido rescatada y se expone en una sala especial habilitada junto a su pirámide, mientras que los restos de otras dos han sido robados y una tercera, en los alrededores, aún no se ha recuperado.
"Este tipo de barco era empleado por el faraón en su viaje a la otra vida", explicó en declaraciones a los periodistas el secretario del Consejo Supremo de las Antigüedades, Mustafa Amin Mustafa, que, aun así, no descartó que los gobernantes los usaran para trasladarse cuando estaban vivos.
Como Keops fue "el más grande y el más fuerte" de los faraones, quiso superar a su padre, Seneferu, y demostrar su poderío e inteligencia con la construcción de una pirámide tan grande y misteriosa que hasta ahora esconde secretos que los expertos no han logrado desvelar, además de enterrar cinco barcas, indicó Mustafa. Tal fue el cuidado con el que se desmanteló la segunda embarcación a la muerte del rey, que es "maravilloso" su estado de conservación, ya que "es como si fuera una momia porque se desmontaron todas las piezas para preservarlas y se usaron productos para protegerlas", según el experto egipcio. No obstante, las piezas han sufrido algunos daños posteriormente por la humedad y la filtración de aire.
El jefe de los arqueólogos japoneses, Sakuji Yoshimura, lamentó la entrada de agua bajo la fosa durante los trabajos de construcción de la sala donde se exhibe la primera barca solar, ya que parte del líquido procedente del cemento utilizado se filtró en la tierra.
Yoshimura, que lleva trabajando 46 años en Egipto, calculó que si todo va bien tardarán tres años en sacar las piezas y analizarlas, antes de montar la barca, tras recrearla por ordenador, para lo que se tardará tres años más.
En opinión de Mustafa, esta vez no tendrán que pasar dos décadas para ver la segunda embarcación expuesta: "Con el primer barco se tardó veinte años hasta que lo instalaron, pero hoy día es diferente porque tenemos más técnicas y posibilidades. Pienso que tardaremos poco tiempo".
La segunda barca fue descubierta en 1985 -la primera, en 1954- y hasta hace poco no se han culminado las dos primeras fases para su recuperación, una dedicada a estudios y otra para construir la jaima y equiparla con los instrumentos necesarios. El destino de la barca es exhibirse cerca de la pirámide del faraón, bien en el futuro Gran Museo Egipcio, que se está erigiendo en la explanada de Guiza, o bien en una sala similar a la que aloja la primera embarcación de Keops. "Tenemos cosas muy importantes por descubrir de la historia, cómo era nuestro pasado, hoy día es nuestro deber preservar y conservar lo que nuestros antecesores han dejado" sentenció Mustafa.
Fuente: El Imparcial
http://www.elimparcial.es/cultura/arrancan-los-trabajos-de-restauracion
-de-la-segunda-barca-solar-del-faraon-keops-99814.html
Reseña: Roberto Cerracin
Este lunes, arqueólogos egipcios y japoneses han comenzado las tareas de restauración de la segunda barca solar del faraón Keops. Los expertos, pertrechados con monos blancos y capucha, iniciaron este lunes el proceso para sacar las 600 piezas de madera en las que fue desmontada en su día la embarcación, enterrada junto a la Gran Pirámide de Keops.
Por razones de conservación, la barca no podrá ver la luz del sol, aunque le dieron la bienvenida en la superficie los focos de las cámaras de televisión en el interior de la carpa, que protege las excavaciones.
Keops (2609-2584 a.C), el segundo faraón de la IV dinastía, hizo justicia a su grandeza y su barca solar consiguió congregar a un gran número de periodistas locales e internacionales que fueron testigos de la extracción de un primer trozo de madera de la fosa, donde ha permanecido sepultada durante milenios.
Junto a la carpa, preparada para mantener las condiciones ambientales óptimas, varios bloques de piedra se alineaban tras haber sido retirados en los últimos meses de la excavación.
Esta barca es una de las cinco que fueron enterradas junto a la famosa tumba de Keops, de las que una ha sido rescatada y se expone en una sala especial habilitada junto a su pirámide, mientras que los restos de otras dos han sido robados y una tercera, en los alrededores, aún no se ha recuperado.
"Este tipo de barco era empleado por el faraón en su viaje a la otra vida", explicó en declaraciones a los periodistas el secretario del Consejo Supremo de las Antigüedades, Mustafa Amin Mustafa, que, aun así, no descartó que los gobernantes los usaran para trasladarse cuando estaban vivos.
Como Keops fue "el más grande y el más fuerte" de los faraones, quiso superar a su padre, Seneferu, y demostrar su poderío e inteligencia con la construcción de una pirámide tan grande y misteriosa que hasta ahora esconde secretos que los expertos no han logrado desvelar, además de enterrar cinco barcas, indicó Mustafa. Tal fue el cuidado con el que se desmanteló la segunda embarcación a la muerte del rey, que es "maravilloso" su estado de conservación, ya que "es como si fuera una momia porque se desmontaron todas las piezas para preservarlas y se usaron productos para protegerlas", según el experto egipcio. No obstante, las piezas han sufrido algunos daños posteriormente por la humedad y la filtración de aire.
El jefe de los arqueólogos japoneses, Sakuji Yoshimura, lamentó la entrada de agua bajo la fosa durante los trabajos de construcción de la sala donde se exhibe la primera barca solar, ya que parte del líquido procedente del cemento utilizado se filtró en la tierra.
Yoshimura, que lleva trabajando 46 años en Egipto, calculó que si todo va bien tardarán tres años en sacar las piezas y analizarlas, antes de montar la barca, tras recrearla por ordenador, para lo que se tardará tres años más.
En opinión de Mustafa, esta vez no tendrán que pasar dos décadas para ver la segunda embarcación expuesta: "Con el primer barco se tardó veinte años hasta que lo instalaron, pero hoy día es diferente porque tenemos más técnicas y posibilidades. Pienso que tardaremos poco tiempo".
La segunda barca fue descubierta en 1985 -la primera, en 1954- y hasta hace poco no se han culminado las dos primeras fases para su recuperación, una dedicada a estudios y otra para construir la jaima y equiparla con los instrumentos necesarios. El destino de la barca es exhibirse cerca de la pirámide del faraón, bien en el futuro Gran Museo Egipcio, que se está erigiendo en la explanada de Guiza, o bien en una sala similar a la que aloja la primera embarcación de Keops. "Tenemos cosas muy importantes por descubrir de la historia, cómo era nuestro pasado, hoy día es nuestro deber preservar y conservar lo que nuestros antecesores han dejado" sentenció Mustafa.
Fuente: El Imparcial
http://www.elimparcial.es/cultura/arrancan-los-trabajos-de-restauracion
-de-la-segunda-barca-solar-del-faraon-keops-99814.html
Reseña: Roberto Cerracin
viernes, 17 de febrero de 2012
Los colosos de Memnon ahora son tres
A los dos colosos de Memnon, uno de los iconos más emblemáticos y eternos del Egipto faraónico, que reciben al viajero a la entrada de la necrópolis de Luxor, en la orilla oeste del Nilo, les ha salido un hermano. Un tercer coloso se yergue desde esta semana cien metros por detrás de las dos famosas estatuas, consideradas epítome de las maravillas y misterios egipcios y admiradas ya por los primeros turistas griegos y romanos.
Esta tercera estatua, también de cuarcita, formaba parte asimismo de la decoración monumental original del arrasado templo funerario de Amenofis III y cayó derrumbada, con su pareja (los colosos del edificio iban de dos en dos), durante un terremoto alrededor del 1.200 antes de Cristo.
La enorme escultura, el coloso norte de la segunda pareja, originalmente de 15 metros de altura, un poco más pequeña que sus dos famosos hermanos, de 18 metros y que también representa a Amenofis III (lo de Memnon es una atribución griega), quedó fragmentada en el suelo y con el tiempo fue semienterrada por agua y barro al subir el nivel freático. Se la redescubrió en 2002 y se la arrastró hasta terreno sólido donde se procedió a restaurarla mientras se consolidaba con cemento su pedestal. Después, se la ha llevado otra vez a su emplazamiento y se ha procedido a la delicadísima operación de volver a levantar semejante monstruo de piedra, proceso que culminó el lunes.
La recuperación del nuevo coloso la dirige desde 2004 un español, Miguel Ángel López Marcos (Soria, 1963), especialista en conservación de la piedra. En la actualidad se están añadiendo otros fragmentos a la estatua, como el pie derecho del rey y bloques de la base, de cara a la inauguración oficial de la misma, el 1 de marzo (al acto le seguirá un congreso científico en el que se explicará el proceso de recuperación).
“Lo más difícil ha sido levantarla”, explica telefónicamente desde Lúxor López Marcos. “Pesa 250 toneladas y estaba rota por cuarenta sitios”. Quedarán aún por recolocar pierna, pecho y cabeza, de entre 14 y 23 toneladas. En esta sensacional operación, que es como leer el poema de Shelley Ozymandias al revés —aquí el faraón resucita del olvido y restablece su abatido orgullo—, se incluye para el verano de 2013 recuperar también la pareja de esta estatua, el coloso sur, hallado en 2003 y que está siendo tratado por el equipo de conservación que trabaja en el monumento.
¿Tendrían voz estos colosos como es fama la tenía el coloso norte de la famosa pareja? Fue precisamente por esa voz, una especie de quejido, por lo que en la antigüedad los griegos identificaron las esculturas con Memnon, hijo de la Aurora y resucitado (tras morir en Troya) cuando los dedos de la diosa del alba lo acariciaban, a lo que él contestaba con un lamento. “El supuesto canto era en realidad un chirrido producido por una grieta en la cuarcita causada por el terremoto que tumbó a sus hermanos”, recuerda López. “La piedra sonaba al dilatarse por las diferencias tremendas de temperadtura que hay aquí del día a la noche, especialmente en verano, que pueden ser de cuarenta grados. Ese sonido, como un plañido, hizo que los primeros viajeros griegos lo asociaran a su mito del hijo de la Aurora. La grieta siguió ensanchándose y al final ya no chirriaba porque no había roce. En resumen, que no, que no creo que ningún otro coloso vaya a cantar”.
El templo funerario de Amenofis III, en la zona de la necrópolis tebana conocida como Kom el-Hetan fue el más grande de los construidos en la margen izquierda del Nilo y se especula con que su proximidad al río provocara que las crecidas inundaran ritualmente los patios y salas exteriores dejando solo la zona interior más sagrada por encima del nivel del agua. Apenas queda nada del edificio, que se alzaba tras los dos famosos colosos, situados a ambos lados del primer pilono de entrada al templo. El segundo pilono contaba con otra pareja y el tercero, que daba ya paso a la avenida procesional de entrada al patio solar, con otra más. Esta tercera pareja de colosos, en este caso de alabastro y más pequeños aún que la segunda (medían 11 metros), también ha sido encontrada y se proyecta igualmente volver a alzarlos.
Cuando los seis colosos originales vuelvan a erguirse, la fisonomía del lugar cambiará todavía más espectacularmente. “La existencia de seis colosos se sospechaba porque la iconografía en los templos egipcios es muy similar”, señala López Marcos.
El coloso norte de la segunda pareja, el que nos ocupa, cuenta como los dos famosos con las esculturas más pequeñas a sus pies de la madre del rey y de su esposa favorita, la gran reina Tiye. Las labores de restaurarlo y alzarlo de nuevo forman parte del Proyecto de Conservación de los Colosos de Memnon y el templo de Amenofis III, en el que trabaja un equipo egipcio-europeo desde 1998 y que dirige la armenia Hourig Sourouzian, con Rainer Stadelmann como co-director.
¿Le va a hacer sombra el nuevo coloso —y los que vengan— a los de Memnon, acostumbrados a llevarse la gloria solitos? “No creo”, responde López Marcos, “pero ahora es el tercer coloso de Memnón y eso hace que haya que replantear todas las guías y libros de historia”.
Fuente: El País
http://cultura.elpais.com/cultura/2012/02/16/actualidad/1329426160_441298.html
Reseña: Roberto Cerracin
Esta tercera estatua, también de cuarcita, formaba parte asimismo de la decoración monumental original del arrasado templo funerario de Amenofis III y cayó derrumbada, con su pareja (los colosos del edificio iban de dos en dos), durante un terremoto alrededor del 1.200 antes de Cristo.
La enorme escultura, el coloso norte de la segunda pareja, originalmente de 15 metros de altura, un poco más pequeña que sus dos famosos hermanos, de 18 metros y que también representa a Amenofis III (lo de Memnon es una atribución griega), quedó fragmentada en el suelo y con el tiempo fue semienterrada por agua y barro al subir el nivel freático. Se la redescubrió en 2002 y se la arrastró hasta terreno sólido donde se procedió a restaurarla mientras se consolidaba con cemento su pedestal. Después, se la ha llevado otra vez a su emplazamiento y se ha procedido a la delicadísima operación de volver a levantar semejante monstruo de piedra, proceso que culminó el lunes.
La recuperación del nuevo coloso la dirige desde 2004 un español, Miguel Ángel López Marcos (Soria, 1963), especialista en conservación de la piedra. En la actualidad se están añadiendo otros fragmentos a la estatua, como el pie derecho del rey y bloques de la base, de cara a la inauguración oficial de la misma, el 1 de marzo (al acto le seguirá un congreso científico en el que se explicará el proceso de recuperación).
“Lo más difícil ha sido levantarla”, explica telefónicamente desde Lúxor López Marcos. “Pesa 250 toneladas y estaba rota por cuarenta sitios”. Quedarán aún por recolocar pierna, pecho y cabeza, de entre 14 y 23 toneladas. En esta sensacional operación, que es como leer el poema de Shelley Ozymandias al revés —aquí el faraón resucita del olvido y restablece su abatido orgullo—, se incluye para el verano de 2013 recuperar también la pareja de esta estatua, el coloso sur, hallado en 2003 y que está siendo tratado por el equipo de conservación que trabaja en el monumento.
¿Tendrían voz estos colosos como es fama la tenía el coloso norte de la famosa pareja? Fue precisamente por esa voz, una especie de quejido, por lo que en la antigüedad los griegos identificaron las esculturas con Memnon, hijo de la Aurora y resucitado (tras morir en Troya) cuando los dedos de la diosa del alba lo acariciaban, a lo que él contestaba con un lamento. “El supuesto canto era en realidad un chirrido producido por una grieta en la cuarcita causada por el terremoto que tumbó a sus hermanos”, recuerda López. “La piedra sonaba al dilatarse por las diferencias tremendas de temperadtura que hay aquí del día a la noche, especialmente en verano, que pueden ser de cuarenta grados. Ese sonido, como un plañido, hizo que los primeros viajeros griegos lo asociaran a su mito del hijo de la Aurora. La grieta siguió ensanchándose y al final ya no chirriaba porque no había roce. En resumen, que no, que no creo que ningún otro coloso vaya a cantar”.
El templo funerario de Amenofis III, en la zona de la necrópolis tebana conocida como Kom el-Hetan fue el más grande de los construidos en la margen izquierda del Nilo y se especula con que su proximidad al río provocara que las crecidas inundaran ritualmente los patios y salas exteriores dejando solo la zona interior más sagrada por encima del nivel del agua. Apenas queda nada del edificio, que se alzaba tras los dos famosos colosos, situados a ambos lados del primer pilono de entrada al templo. El segundo pilono contaba con otra pareja y el tercero, que daba ya paso a la avenida procesional de entrada al patio solar, con otra más. Esta tercera pareja de colosos, en este caso de alabastro y más pequeños aún que la segunda (medían 11 metros), también ha sido encontrada y se proyecta igualmente volver a alzarlos.
Cuando los seis colosos originales vuelvan a erguirse, la fisonomía del lugar cambiará todavía más espectacularmente. “La existencia de seis colosos se sospechaba porque la iconografía en los templos egipcios es muy similar”, señala López Marcos.
El coloso norte de la segunda pareja, el que nos ocupa, cuenta como los dos famosos con las esculturas más pequeñas a sus pies de la madre del rey y de su esposa favorita, la gran reina Tiye. Las labores de restaurarlo y alzarlo de nuevo forman parte del Proyecto de Conservación de los Colosos de Memnon y el templo de Amenofis III, en el que trabaja un equipo egipcio-europeo desde 1998 y que dirige la armenia Hourig Sourouzian, con Rainer Stadelmann como co-director.
¿Le va a hacer sombra el nuevo coloso —y los que vengan— a los de Memnon, acostumbrados a llevarse la gloria solitos? “No creo”, responde López Marcos, “pero ahora es el tercer coloso de Memnón y eso hace que haya que replantear todas las guías y libros de historia”.
Fuente: El País
http://cultura.elpais.com/cultura/2012/02/16/actualidad/1329426160_441298.html
Reseña: Roberto Cerracin
sábado, 4 de febrero de 2012
Arqueólogos checos descubren un templo perdido en Sudán
Arqueólogos checos han descubierto un templo perdido hace mucho tiempo del período de Meroe cerca del pueblo de Van Bon Naga en Sudán, segun informo a los periodistas Pavel Onderka, del Museo Náprstek de las Culturas de Asia, África y América, de Praga.
El recinto del templo es amplio y está situado 130 km al norte de Jartum. Los viajeros europeos vieron los restos del templo en el siglo 19, pero luego el templo desapareció en el desierto, dijo Onderka que lidera la expedición arqueológica Checa.
Dijo que la expedición checa encontro un anillo de sello con una imagen del dios Leon de Nubia Apede-Mak, una estatuilla original egipcia del dios Osiris, una piedra con jeroglíficos de Meroe y partes de bloques de piedra arenisca.
Arqueólogos checos han estado trabajando en la localidad Vad Bon Naga durante tres temporadas.
En el período del reino de Meroe, desde el siglo 4 aC hasta el siglo cuarto, el sitio fue sede de una de las mayores ciudades de la antigua Nubia, la Arabikeleb. Alrededor de la vuelta del milenio, un gran palacio y templos por lo menos cinco fueron construidos en la ciudad con 25.000 habitantes.
Arqueólogos checos previamente habian descubierto un palacio perteneciente a la reina Amanishakheto, que gobernó en el siglo 1 aC En la temporada pasada continuaron las obras de conservación y restauración en el palacio, que es el mejor conservado de todos los palacios de la época de Meroe.
La expedición de Sudán es una continuación de la larga tradición de investigación arqueológica y etnográfica Checa en el Valle del Nilo Occidental.
Aparte de la realización de investigaciones, los arqueólogos checos en Sudán se han establecido contactos con los habitantes locales. Mediante una asociación entre Van Bon Naga y la ciudad checa de Otrokovice. También ayudan a apoyar a las escuelas locales.
Originalmente querían construir un pozo en Vad Bon Naga, pero se llegó a la conclusión de que el plan no era factible debido a las condiciones geológicas locales. Como resultado, se decidió construir obras hidráulicas para abastecer de agua potable. La localidad carece de agua potable y la gente usa la del Nilo Occidental.
El recinto del templo es amplio y está situado 130 km al norte de Jartum. Los viajeros europeos vieron los restos del templo en el siglo 19, pero luego el templo desapareció en el desierto, dijo Onderka que lidera la expedición arqueológica Checa.
Dijo que la expedición checa encontro un anillo de sello con una imagen del dios Leon de Nubia Apede-Mak, una estatuilla original egipcia del dios Osiris, una piedra con jeroglíficos de Meroe y partes de bloques de piedra arenisca.
Arqueólogos checos han estado trabajando en la localidad Vad Bon Naga durante tres temporadas.
En el período del reino de Meroe, desde el siglo 4 aC hasta el siglo cuarto, el sitio fue sede de una de las mayores ciudades de la antigua Nubia, la Arabikeleb. Alrededor de la vuelta del milenio, un gran palacio y templos por lo menos cinco fueron construidos en la ciudad con 25.000 habitantes.
Arqueólogos checos previamente habian descubierto un palacio perteneciente a la reina Amanishakheto, que gobernó en el siglo 1 aC En la temporada pasada continuaron las obras de conservación y restauración en el palacio, que es el mejor conservado de todos los palacios de la época de Meroe.
La expedición de Sudán es una continuación de la larga tradición de investigación arqueológica y etnográfica Checa en el Valle del Nilo Occidental.
Aparte de la realización de investigaciones, los arqueólogos checos en Sudán se han establecido contactos con los habitantes locales. Mediante una asociación entre Van Bon Naga y la ciudad checa de Otrokovice. También ayudan a apoyar a las escuelas locales.
Originalmente querían construir un pozo en Vad Bon Naga, pero se llegó a la conclusión de que el plan no era factible debido a las condiciones geológicas locales. Como resultado, se decidió construir obras hidráulicas para abastecer de agua potable. La localidad carece de agua potable y la gente usa la del Nilo Occidental.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)